viernes, 11 de febrero de 2011

Página en blanco

Lo que más asusta a quien escribe es una página en blanco.
Existe sobre todo un momento especialmente difícil y es cuando tienes una idea en la cabeza, esa que crees que será "la idea", y tienes trazado un plan...pero has de empezar.
Sólo necesitas la primera frase, todo lo demás se construye a partir de esa primera frase.
Las palabras van surgiendo solas, una detrás de otra, como un torrente de letras que no puedes parar, que no sabes a ciencia cierta de dónde vienen y que pueden dejar de fluir en cualquier momento.
Pero la maldita página en blanco es como un incómodo silencio entre dos jóvenes amantes.
Ella te mira, espera y te interroga tan blanca ella, tan virgen, sabiendo que será su primera vez y que la recordará siempre. Tú sabes que debes dar el primer paso, es lo que quieres hacer en realidad pero no sabes cómo, y la presión te anula.
Solamente necesitas cerrar los ojos, dejarte llevar y olvidarte de quien eres...
Una buena primera frase puede enganchar a un lector, y puede hacer que te perdone los momentos más flojos por los que inevitablemente pasa siempre un relato.
Estoy convencida de que para escribir (no bien ni mal, simplemente escribir), hace falta tener una sensibiliad especial, como también para leer.
Debes saber ponerte en la piel de otros, imaginar situaciones y sentirlas. También debes tener tiempo, interés y curiosidad por cómo se va a desarrollar la historia que empezaste, paciencia para no precipitar las secuencias y dejar que tus personajes se nutran de tus propias vivencias.
Las palabras tienen un gran poder.
Pueden trasladarte a lugares en los que nunca has estado y hacer que los reconozcas.
Puedes vivir emociones y sentimientos que jamás soñaste.
Tambén puedes apuñalar a alguien en pleno centro con tan solo una frase.
Aunque las peores frases son las que se quedaron por decir y te van quemando por dentro, las que jamás escuchará de tus labios la persona a la que amas, porque esas se tatúan en tu mente y no se olvidan, por muchos años que pasen.
Las palabras definitivamente tienen un gran poder, y en muchas ocasiones con ellas se me escapa mi propio yo.  A menudo salen de mis labios sin apenas darme tiempo a pensar en ellas, y aunque intentara taparme la boca no alcanzaría a atraparlas.
Y aquí estoy, buscando esa primera frase .
Si estás al otro lado de la página, deslizando tu mirada por donde antes yo tracé las palabras has de saber que estoy más desnuda así que cuando no llevo ropa, ahora estás viéndome por dentro como yo me veo.
Y lo unico que nos separa en este momento es lo que antes fue tan solo una página en blanco

3 comentarios:

  1. buen comienzo, ahora a llenar páginas!!

    ResponderEliminar
  2. Me gustan las cosas naturales, descubrir el olor, el tacto y el sabor de la piel, sin tapujos, sin vergüenzas, sin ropa que transforme lo que somos, a lo que queremos mostrar...pero me fascina mucho más cuando alguien se desnuda interiormente, se necesita mucha más valentía para mostrar los sentimientos, que para andar desnudos por la calle...a pesar de que siempre, el resultado es mucho más bello. Qué pena, que nos empeñemos en poner a nuestro...llámalo alma, llámalo ser...o como quieras llamarlo...tantos abrigos de falsa piel!!!. Bravo Almu!!!, bravo por tu valentía y por tu gran belleza interior!!!!!!

    ResponderEliminar
  3. muchas gracias Aitana, muy bello tu comentario

    ResponderEliminar